El Negrito y su caballerizo fueron sorprendidos por sujetos armados e inyectado el 26 de octubre. Y el 15 de este mes le tocó a la yegua Balbi Di y su acompañante. Hoy los ejemplares están fuera de peligro.
“Resulta una situación bien delicada. La seguridad no solamente es con los animales, sino con cualquier persona que puedan atracar en las puertas del hipódromo”, dijo el doctor Luis Alfredo Wadskier, presidente de la Asociación de Propietarios Valencianos.
“Vamos a tratar de proponerle al INH que los ejemplares no caminen rumbo a la carrera por ese sendero oscuro. Que se haga una vereda alumbrada al lado de la pista y colocando dos vigilantes en todo el trayecto. Es para que los ejemplares pasen a la vista de todo el mundo. Eso se puede hacer”, expresó Wadskier.
“Lo que tenemos que hacer, en mi caso, que no paro caballos y lo que quiero es ganar, contratar a un personal privado que custodie los ejemplares hasta el ensillaje. Me están forzando”, soltó Wadskier.
El presidente de la Unión de Entrenadores de Valencia, Renny Verastegui, también exigió seguridad.
“Hemos acordado con el director del hipódromo, Énder Lugo, para carnetizar a los trabajadores y crear pases a los vehículos. Mostró su apoyo. Vamos a trabajar duro por un mejor hipismo”, indicó.
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